Mi nombre es Vera Troncoso, veterinaria y madre de Gigi (que está en el cielo) y Póker, dos hermosos English Cocker Spaniels con personalidades tan diferentes como sus colores.

Crecí rodeada de animales, mis padres me permitieron tener casi todos los animales aptos (y algunos no tan aptos) para un apartamento. El amor que siempre recibí de mis animales y esas ganas de ayudarlos y salvarlos a todos hizo que no tuviera que pensarlo mucho para decidirme a estudiar Medicina Veterinaria.

Tengo ya 10 años trabajando en el área clínica de animales menores, poseo una certificación en nutrición de mascotas y una de las cosas que más disfruto es aconsejar a mis clientes. Me encanta escuchar las características únicas de cada mascota y como no, de su dueño, y a partir de ahí, buscarle solución a sus problemas basándome no sólo en conocimientos médicos, sino también en mis experiencias personales como dueña de muchos animales.

Olfateando por ahí nace del amor que tengo por mis perros y por los animales en general, surge para compartir con los demás parte de mi vida y experiencias, tanto personal como profesional, a través de consejos, trucos y productos que pueden facilitar y mejorar la vida junto a nuestros adorados cuadrúpedos.